Ivette: una adicción ineludible - La letra corta

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21 de noviembre de 2013

Ivette: una adicción ineludible




Por Claudia Bofill González

Ivette CepedaCuba es, sin lugar a dudas, cuna de incuestionable talento artístico. No escapa a este hecho el desempeño musical de las féminas: cantantes de la talla de La Lupe, Celia Cruz, Omara Portuondo, Helena Burque… han trascendido el panorama cubano para conquistar la admiración y el reconocimiento del público internacional. A lo largo de la historia, sus nombres han definido la cultura de su tiempo y han merecido la preferencia de sucesivas generaciones. 

A pesar de su aún breve carrera artística, Ivette Cepeda se está insertando con éxito en el paradigma de la voz femenina, y no se duda que, con acelerados pasos,  logre el ascenso al Olimpo de las intérpretes nacionales.


Profesora de oficio,  no vaciló en seducir los escenarios con su instrumento más eficaz: la voz.  No se le puede rebatir su capacidad interpretativa, con la cual, más que cantar, pareciera que regala al público su alma fragmentada.  

Como aderezo a su talento, una hábil elección de su repertorio le hace sumar seguidores constantemente: el hecho de cantar temas de autores como Joaquín Sabina --se confiesa «muy atraída por sus verdades, sus historias»-- Silvio Rodríguez,  Pablo Milanés,  Fito Páez, Jorge Drexler, incita a los admiradores de estos a que se sientan identificados con su sensibilidad musical y valoren sus acertadísimas versiones. Y, efectivamente, es esta estrategia la que, en la mayoría de los casos, ha distinguido su nombre y su arte del resto de las intérpretes contemporáneas y le ha valido de acicate en la obtención de público; aunque luego este, más allá de disfrutar de temas de reconocida calidad artística, comienza a incorporar a su horizonte de preferencias su incuestionable voz y su particular modo de interpretación.

Sin embargo, uno de sus méritos más resaltables es que Ivette, además de la balada, la nueva y vieja trova y el feeling,  se ha sumado al rescate del bolero. Este género, que se ha ido opacando por las nuevas formas de creación artística en el campo de la música, y que ha quedado, prácticamente, en el recuerdo de una generación pasada, es retomado con una fuerza indecible por esta cantante.  Su trabajo al respecto es loable, sobre todo, porque el público más joven disfruta este género en su voz y retoma una importante tradición musical que nunca debió ser relegada a planos tan distantes.

Estaciones, su primera gran producción musical, la dotó de renombre nacional, luego de cierto tiempo deleitando con su voz en centros nocturnos de la capital y programas musicales de la Televisión Cubana. Así pues, una vez lanzado el CD en el mercado, la cubana ya tenía asegurada una multitud de seguidores en su búsqueda. En su promoción, el viaje que hiciera a Francia -del cual ha quedado como testimonio la multimedia “Una cubana en París”- le hizo colocar con méritos su nombre más allá del ámbito nacional. A propósito, vale resaltar que su actividad interpretativa incluye temas en idiomas foráneos, como, por ejemplo, “La vida en rosa” (francés) y “Chicas de Ipanema” (portugués), entre otros.

 Resulta evidente que Ivette está escalando presurosamente en su vida artística. Cada día su canto se hace más prolífero, pues escucharla es tener la suerte de asistir a un acto de pasión, de desenfreno en su interpretación. Quedar hipnotizados con su timbre peculiar, con su entrega, su desenvolvimiento escénico, es la típica reacción de todo aquel que se acerque a su arte, no desde la fría perspectiva de “una canción más” entre tantas, sino desde la voluntad de encontrar una identificación que rebase los límites del texto artístico; y es que al escuchar su música asistimos no al esplendor de la canción, sino al instante en que esta cobra vida, y desautomatiza todos los sentidos: cuando esta diosa canta, se hace imposible huir a la embriaguez de su voz, todo lo que no provenga de ella deviene ruido. El cetro de la canción es suyo. Toda ella es la canción.

1 comentario:

  1. Ivette es una joven promesa de la música cubana que promete aun... los invito a que lean este artículo que con todo se queda por debajo de la realidad. Gracias Claudia

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